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El Congreso Mundial “Educar hoy y mañana. Una pasión que se renueva”, se celebra en Roma, en el Auditorium della Conciliazione.

La UNIAGUSTINIANA sigue recorriendo el mundo, tomando elementos para continuar fortaleciendo la educación desde cada una de sus esferas y permeando a su población estudiantil.

El evento que es organizado por la Congregación para la Educación Católica de la Santa Sede con motivo del cincuenta aniversario de la declaración conciliar “Gravissimum Educationis”, cuenta con representación agustiniana, por parte de la directora del Programa de Filosofía Lina Marcela Cedeño Motta y Ovidio Díaz González, director de la unidad de Humanidades, de la Facultad de Humanidades, Ciencias Sociales y Educación.

“Esta oportunidad nos lleva a conocer posiciones diversas sobre el papel, la pertinencia y la finalidad de la educación en el mundo contemporáneo y así dar respuesta precisa al cuestionamiento sobre cuál es el valor de la escuela católica hoy, bajo la premisa del mundo contemporáneo, como un mundo pluricultural, globalizante y de relativismo religioso y social que requiere formación sólida de comunidad en donde, como dijo el Santo Padre Francisco: no se puede vivir sin mirar los desafíos ni responder a los retos”, explicó Cedeño Motta.

Por su parte Ovidio Diaz, indica que “hoy en día las universidades católicas deben mirar dentro de sí, cuál es y será el papel que desempeñan en la formación integral de cada uno de sus miembros, tomando como base los valores del evangelio, para así lograr que los profesionales no sólo sean egresados que manejen, programen y ejecuten máquinas, instrumentos y demás elementos que le son útiles en su profesión, sino que, se debe lograr inculcarles en su ser la semilla de la misericordia, a partir de la cual ellos puedan ver en el otro, la oportunidad de construir sociedad y ciudadanos para un mejor progreso social y comunitario".

La participación de este encuentro permite adicionalmente gestionar la afiliación de la UNIAGUSTINIANA a la Federación Internacional de Universidades Católicas, a la Oficina Internacional de la Educación Católica y a la Escuela de Alta Formación.