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Gracias a las posibilidades que se brindan en los intercambios académicos y culturales Hernán Torres estudiante de séptimo semestre de Cine y Televisión de la UNIAGUSTINIANA vivió una experiencia laboral y personal que no olvidará, esta es su crónica.

Desde hace más de treinta años un Papa no venía a Ecuador, ahora el Papa Francisco decide comenzar su gira por Latinoamérica desde este punto. El movimiento logístico fue inmenso, todo esto coordinado por la misma gente del Vaticano que venían desde España y todas las unidades móviles tenían que reportarse a ellos para unificar las señales, el total para dar cobertura para el movimiento del Papa fue de 20 unidades móviles distribuidas en Quito y en Guayaquil, así mismo había cubrimiento desde el aire por un helicóptero y unos camarógrafos que siempre iban en la caravana del Papa.

El trabajo de las unidades móviles de Enclave en conjunto con el canal de televisión de Oromar tv consistió en cubrir seis puntos clave, contando con dos unidades móviles, el primer punto estaba en Monte Olivo, donde el Papa hacia el cambio del carro en el que venía del aeropuerto al Papa móvil, el segundo punto fue la avenida 6 de Diciembre y República, el tercer punto fue en la avenida las Monjas, el cuarto punto fue la iglesia de San Francisco, el quinto punto fue un ancianato que el Papa visitó y el último punto fue en la vía al Quinche.

El total de personas que trabajó fue de 18, de los cuales 12 estuvieron trabajando todos los días de corrido para poder cumplir con las exigencias, con llamados a las 3:30 a.m. llegando a descargar equipos y material a la oficina en la noche.

Desde mi experiencia personal fueron días de bastante trabajo, donde pude conocer el movimiento de una móvil con capacidad de 8 cámaras con fibra óptica, hacer el montaje en lugares como la iglesia de San Francisco no fue tarea fácil, ya que la estructura de la iglesia es bastante antigua y por ende se tiene que tener mucho cuidado con no dañar nada ya que sería imposible remplazarlo.

Otro reto grande fue pasar un cable por una cañería, ya que los cables no podían cruzar las calles por arriba por seguridad del Papa, así que nos tocó meternos en una cañería que atravesaba la calle para poder tener una cámara al otro lado de la misma. Los drones estaban prohibidos cuando el Papa pasaba, pero antes de

que llegará siempre se lograban hacer algunas tomas que se podían enviar después para que se viera la multitud de gente esperando al Papa.

Para muchos la visita del Papa es de alegría, para otros el trabajo se incrementa bastante como sucedió con nosotros, sin embargo aunque fue agotador cumplir con este tipo de requerimientos, es una experiencia que no se olvida y fue una buena forma de comenzar mis prácticas en Ecuador, a la expectativa de qué más puede venir.