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Han pasado cinco años desde la firma del proceso de paz entre la guerrilla de las Farc y el gobierno colombiano y desde entonces se han registrado más de 1.300 líderes, lideresas, defensores de derechos humanos y firmantes del acuerdo asesinados. Las cifras dan cuenta de un proceso de reincorporación debilitado y una implementación a la que todavía le falta mucho por trabajar.

Precisamente al hablar de reincorporación es imposible no pensar en la economía solidaria, pues este sistema socioeconómico está contemplado en el punto número uno de los acuerdos en La Habana que plantea una reforma rural integral. ¿Cuáles son entonces las políticas públicas que nos ayudarán a implementar lo acordado? ¿Qué rol juega la investigación y la educación en la construcción de paz en Colombia?

Para resolver estos y otros interrogantes, la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas y el programa de Administración de Empresas desarrollaron el primer Foro de Economía Solidaria y Paz, que se llevó a cabo en el auditorio Fray Andrés de San Nicolás del Campus Tagaste y que fue transmitido a través de nuestras redes sociales institucionales.

 

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El encuentro estuvo moderado por el docente e investigador de la Uniagustiniana, Dustin Gómez y tuvo como invitados a Lina Blanco, doctorante en Economía Social de la Universidad de Valencia; Juan Fernando Álvarez, doctor en Ciencias Sociales de la Universidad de Lisboa; Mario Barbosa, doctorante en Estudios de Desarrollo y Territorio de la Universidad de la Salle y Laura Restrepo, Coordinadora del Departamento de Servicios Educativos, CINCOP.

Para iniciar el encuentro, el profesor Gómez explicó la necesidad de dialogar con todos los sectores para entender sus puntos de vista y realizó una breve descripción del significado de economía solidaria, entendida como un modelo que “no busca el lucro sino la democratización, la autonomía y mejorar el bienestar de las personas”.

Es por eso que en el marco de este sistema se plantea la reincorporación de los excombatientes, como bien lo explicó Laura Restrepo: “hemos entendido que no puede haber paz si no hay un cambio en el modelo económico, porque el modelo económico en el que estamos promueve la competencia y fomenta las violencias y la desigualdad, la economía solidaria entra a romper todos esos esquemas”.

En ese sentido, para hablar de las políticas públicas que dan vía libre a la implementación, Álvarez señaló que “lo público no se reduce a lo estatal, ni lo estatal se reduce a lo gubernamental, eso nos habla de la capacidad de integración entre actores diferentes para tener una unidad de propósito”, haciendo referencia a que no podemos pensar en soluciones sin incluir las necesidades de todos los involucrados que no siempre coinciden con nuestra cosmovisión. 

Blanco, por su parte agregó que “hay niveles de responsabilidad y corresponsabilidad.  Todos somos llamados a construir convivencias pacíficas.  Pero la responsabilidad cambia cuando hay diferentes niveles de organización, no es lo mismo la que tengo como ciudadana que la que tiene una cooperativa, su impacto y su radio de acción son diferentes por su influencia en la masa social”.

En el marco de este encuentro, Barbosa también rescató el convenio que tiene la Uniagustiniana con la Unidad Administrativa Especial de Organizaciones Solidarias, UAEOS “que ha posibilitado que varios productos de investigación, más de 20 en tres años, hayan sido generados gracias al acuerdo”.

 

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  >>Revive la conversación completa aquí: